El día comenzó del todo normal, me desperté un poco tarde con dolor de cabeza por falta de sueño. Seguido de tomar algo de fuerzas me levanto tomar mi ducha mañanera para terminar de despertar y proseguir con mis actividades del día a día. Rumbo al trabajo platico con mi madre de lo que haría si me llegara a sacar la lotería, un poco fantaseando con una vida sin problemas económicos, mientras la playlist de Spotify de ella sonaba de fondo, recuerdo una canción de los Temerarios.
Al dejarme en el Seven mi madre se retira, yo entro a comprar mi café y dona de chocolate, la cual guardo en la mochila para mas de rato mientras le doy un sorbo al café. Saliendo voy en busca de mis cigarros que tengo en mi pantalón junto a mi encendedor con ilustraciones de sandias. Maniobrando un poco con el café, los cigarros y el encendedor logrando encender un cigarro al mismo tiempo que camino hacia la entrada del edificio donde se encuentra la oficina.
Sentado en el área de fumadores fuera del edificio reviso con algo de sueño mi celular, procedo a prender mis audífonos de bluetooth para escuchar algo de música en lo que espero a que den las 8 y poder entrar a la oficina.
Mirando al rededor puedo notar nuevamente a la señora que casi todos los días espera el camión a esa hora, su mochila se ve algo pesada pero creo que ya esta acostumbrada a su peso.
Al dar las 8 entro al edificio rumbo al ascensor del fondo del edificio, este tarda una eternidad entre pisos, me toma de 3 a 5 minutos el llegar al tercer piso. Al salir del elevador me percato como la mayoría de los días que todavía no llega Frenando de Recursos Humanos, el habré la puerta. Toca esperar sentado en el piso de 10 a 20 minutos en lo que se digna a llegar.
Ya adentro el día marcha normal, peticiones de pantallas y avanzarle a proyecto de menor importancia, con lapsos de tiempo para ver mi celular y así perder tiempo. Mis compañeros llegan tarde como de costumbre, al igual que todo el personal de la empresa, nada fuera de lo normal. Saludos de buen día y choque de manos, trabajo con ligeras platicas por momentos, nada que resaltar de 9 a 12:30.
Llega la hora de la comida, 12:50 me dispongo a salir por una torta de puerco a las Teo Burger, en el trayecto de mi caminata prendo el tercer cigarro del día. Al querer pagar mi torta resulta que la terminal no funciona y toca ir por segunda vez al Seven, esta vez para sacar dinero y poder pagar en efectivo. Al recoger mi torta me dirijo de nuevo al tercer piso a esperar a mis compañeros para ir a comer al primer piso, a el área de mesas del edificio.
Luis y Gustavo ya hacían en el primer piso junto a Eduardo y Hugo, mientras yo estaba esperando a Monica a que calentara su loche del día. Ya en el primer piso rumbo a las mesas comenzó la platica con Monica respecto a el Juego de The Sims, conversación que duro toda la hora y media de comida. Ya los dos platicando sin querer ignorando a nuestros compañeros, sentía que el tiempo iba lento pero que se terminaba muy rápido este momento, sentimientos sin importancia.
De regreso en la oficina seguí con mis labores mientras continuaba la conversación por Whatsapp con Monica sobre el juego. Ocasionalmente me distraía con el celular al ver la conversación, cosas sin importancia. Ansioso por que dieran las 5 y huir del sitio. Una espera algo larga y tediosa ya que cada minuto mas cerca de la hora de salida, este se hacia mas largo.
En el camión ya viendo vídeos de Kpop como de costumbre, ocasionalmente seguía la conversación con Monica por Whatsapp, dato sin relevancia. El calor se podía sentir ya que empezaba a sudar, la señora que estaba sentada a lado mio con su hija, dejo caer su bolso pesado sobre mi pierna, creo que no se dio cuenta pero no le di importancia ya que tenia mis pensamientos en… Ya tomando el metro todo tranquilo al igual que el metro-bus.
Ya a la puerta de mi casa me doy cuenta que la puerta esta atorada, esta no lograba abrir, estresado por la caminata desde la parada del metro-bus hasta mi casa, agregándole el sol de julio, no logro abrir la puerta. Después de varias patadas y empujones a la puerta sedo y mejor me siento recargando la espalda en ella.
Quedándome dormido por el cansancio del día escucho un estruendo que hace que me despierte al instante, al abrir los ojos me percato que no estoy en la entrada de mi casa me encuentro en un lugar oscuro con un olor penetrante a putrefacción. Al incorporarme siento el piso húmedo y aceitoso, trato de buscar mi celular para prender la linterna pero me doy cuenta que estoy completamente desnudo. Exaltado y asustado empiezo a palpar con las manos para encontrar una pared y así ubicarme sobre algo, al instante se abre una puerta de forma vertical acompañada de un sonido parecido al frotar dos pedazos de carne cruda bañada en limón. Una sombra a contra luz puedo percibir desde la puerta, sin mas que distinguir cae sobre mi un flashaso y acto seguido despierto en mi cama.
Si llegaste hasta aquí te felicito, como recompensa te debo un café.
No olvides reclamarme tu premio.
Gracias por leer mi día tan aburrido.
Me gustaría tu opinión al respecto.